Partiendo de Cala Gonone, a lo largo de la costa del Golfo de Orosei que se extiende desde Punta Nera hasta Capo Monte Santo, os encontraréis con dos increíbles fenómenos de la naturaleza: la Gruta del Bue Marino y la Gruta del Fico.
La Gruta del Bue Marino es la primera cueva que encontramos al sur de Cala Gonone. Se divide en dos partes: la zona sur,que es accesible únicamente por mar con cualquira de la gran cantidad de barcos que organizan excursiones a lo largo del Golfo de Orosei todos los días; y la zona norte, accesible solo a pie a través de una ruta de unos 50 minutos desde Cala Fuili entre lentiscos y sabinares, que conduce a unas escaleras metálicas que te permitirán cruzar la pared rocosa que acaba directamente en el mar frente a la entrada de la Gruta.La Gruta del Bue Marino tiene aproximadamente 5 km de largo y se llama así porque antiguamente en ella vivía el “bue marino” o lo que es lo mismo la foca monje. Te espera un camino repleto de estalactitas y estalagmitas que ofrecen un espectáculo cromático extraordinario gracias a la luz que penetra en su interior y a las aguas cristalinas del gran lago salado de más de un kilómetro de superficie. La gruta también es fundamental desde el punto de vista arqueológico; de hecho, en una pared de la parte inicial se encontraron pinturas rupestres que datan de la cultura de Ozieri, que representan una danza alrededor de una talla particular considerada por los estudiosos como una representación del sol.
En cambio, más al sur entre Cala Mariolu y Cala Biriola, se encuentra la Gruta del Fico con su imponente entrada a 10 metros sobre el nivel del mar. La primera exploración de la cueva se remonta a 1957 y aún se encuentra en fase de exploración, por ahora se conocen unos 1800 metros de la misma. La visita tiene una duración de unos 50 minutos y guías expertos te conducirán entre sifones submarinos y cursos de agua subterráneos. Las entradas cuestan 8 € para los adultos y 4 € para los niños de entre 6 y 12 años.
